26 noviembre 2011

Ansia y asfalto






 


Te tuerces, retuerces. Te enroscas, desenroscas. Te esfuerzas. Ansias, lleno de ansias. Extenuada hasta la extenuación. Ten enfrente, enfrentate de frente. Frente a frente. Te envuelves, regresas al centro, te enroscas y tuerces sin posibilidad de giro al frente, siempre enfrente en tu mente retuerces. Ansias, bocanadas de ansias, desenroscándose en la mente. De antemano siempre hacia adelante, sin esfuerzo aparente envuelta entre la mente y el frente. El ojo cierto dentro, envuelto, enmarañado, ansiosamente lleno. Torcido. Te retuerces y regresas rápidamente a la mente, a la consciencia, al conocimiento dentro de la mente. Otrora arriba, ahora enfrente, de frente hasta la extenuación. Ansias, buches de ansias en la mente. Y en la frente agua salina, fría, recurrente, llenando espacios mientras te retuerces. Consciente entre ansias te esfuerzas, resbala el agua recurrente.
Tendida, desenroscada, ausente,... su corazón deja de latir junto al asfalto.



Judimendi trece de enero de dos mil once



No hay comentarios:

Publicar un comentario